2024 Autor: Jasmine Walkman | [email protected]. Última modificación: 2023-12-16 08:29
Clorofila es un compuesto orgánico que se encuentra en todas las plantas verdes y algas. Quizás no haya nadie que no sepa que la clorofila es el factor clave en la fotosíntesis, absorbiendo la luz solar y usándola para convertir el dióxido de carbono en carbohidratos.
No es una coincidencia que algunas personas llamen a la clorofila el equivalente vegetal de la sangre humana porque es la principal fuente de vida vegetal. La otra razón es que la clorofila está estructurada a nivel molecular casi como la hemoglobina en la sangre humana. La diferencia está en el átomo central de la molécula de clorofila, que contiene magnesio, no hierro.
En 1926, el científico Charles Schnabel estudió las gramíneas de cereales y el posible vínculo entre la hemoglobina en humanos y la feofitina en clorofila. Investigaciones posteriores solo confirmaron el hallazgo y todas llevaron a la conclusión de que la clorofila es un estimulante de los glóbulos rojos en la médula ósea.
Beneficios de la clorofila
La clorofila se utilizó por primera vez con fines médicos a mediados del siglo pasado. Realiza dos funciones muy importantes: mejora la circulación sanguínea y aumenta la hemoglobina.
El cloroforilo tiene un efecto beneficioso sobre el sistema cardiovascular, mejora el trabajo del útero y los pulmones, limpia el hígado de toxinas, metales pesados y productos de desecho. Tiene un efecto antiinflamatorio, antioxidante y regenerador muy valioso.
Muchos expertos creen que uno de los beneficios para la salud más importantes que aporta la clorofila es enriquecer la sangre con oxígeno y, al mismo tiempo, limpiarla de toxinas nocivas.
Clorofila protege y ayuda en el tratamiento de la aterosclerosis, ayuda a reparar los tejidos, cura heridas y enfermedades asociadas con la presencia de cálculos de oxalato.
Mejora la función tiroidea y aumenta la inmunidad, protege contra infecciones bacterianas, virales y fúngicas.
Se cree que el cloroforilo tiene propiedades anticancerígenas pronunciadas, que bloquea y elimina del cuerpo las sustancias químicas nocivas que dañan el ADN. La clorofila tiene altos niveles de vitamina A, lo que la convierte en un poderoso antioxidante.
La clorofila también contiene ácido fólico, hierro, proteínas, calcio, vitaminas K y C, todos los cuales son extremadamente importantes para fortalecer la inmunidad. A la clorofila también se le atribuye una acción antiséptica porque fortalece la integridad de los tejidos y aumenta la resiliencia celular, lo que a su vez evita el crecimiento de bacterias.
Clorofila es extremadamente valioso en términos de eliminar el mal aliento y otros olores corporales desagradables. Ayuda a mantener un sistema digestivo saludable, lo que conduce a olores menos desagradables.
La clorofila proporciona una gran cantidad de magnesio y ayuda a llevar oxígeno a todos los tejidos y células. El magnesio es importante no solo para el suministro de oxígeno, sino también para la formación de huesos, nervios y función muscular.
Además, es crucial para la salud de los riñones, el hígado, los sistemas digestivo y nervioso, el sistema cardiovascular, las glándulas que secretan hormonas y el cerebro. Todos dependen del magnesio para sus funciones. La clorofila ayuda con la anemia porque estimula los glóbulos rojos.
La dieta moderna de productos muy refinados, bajos en fibra y altos en grasas, provoca serios problemas de estómago y colon. A saber, hortalizas verdes con un alto contenido de cloroforilo ayuda para una buena salud del colon.
Fuentes de clorofila
La clorofila tiene una serie de ingredientes que la convierten en una parte valiosa de una dieta saludable. Se encuentra principalmente en verduras de color verde oscuro: espinacas, col rizada, brócoli, lechuga, guisantes. Se encuentra en el trigo y la cebada, la espirulina y algunas algas. La regla es que cuanto más verde es un alimento, más rico en clorofila es.
Sin embargo, cuando se consumen estas verduras, no deben someterse a un tratamiento térmico prolongado porque reduce la clorofila en ellas. Es mejor comer crudo o cocido por un tiempo corto.
Clorofila ahora se puede encontrar en forma de varios suplementos dietéticos que se pueden comprar en tiendas especializadas. Sin embargo, es mejor que la sustancia valiosa se obtenga de sus fuentes vegetales naturales.
Una nueva investigación aporta datos muy interesantes sobre el consumo de alimentos ricos en clorofila. Resulta que lo mejor para las personas es comer verduras cuando están al sol, porque de esta manera las mitocondrias en las células humanas producen mucha más energía cuando están al sol.
El mismo estudio muestra que gracias a una dieta rica en clorofila, las personas son capaces de captar la luz solar con una determinada longitud de onda, lo que aumenta la energía producida por las mitocondrias.