¿Qué Causa Un Mayor Apetito Por Lo Salado?

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¿Qué Causa Un Mayor Apetito Por Lo Salado?
¿Qué Causa Un Mayor Apetito Por Lo Salado?
Anonim

Cualquiera que haya comido una gran porción de patatas fritas, palomitas de maíz o patatas fritas sabe que es difícil resistirse.

Muchas personas consumen demasiada sal en sus alimentos y apetito por lo salado sigue siendo un problema común.

Algunas personas creen que el deseo por un determinado alimento es una señal de que el cuerpo tiene deficiencia en algo, pero no suele ser así. La mayoría de los apetitos están asociados con alimentos poco saludables que ofrecen poca o ninguna saciedad.

El apetito por los alimentos salados. es común y suele ser el resultado de factores como el aburrimiento o el estrés. A veces, el deseo de algo salado puede estar relacionado con una afección médica o una falta de sodio.

En este artículo, analizamos siete razones por las que puede sentirse inexplicable hambre de alimentos salados - incluyendo falta de sueño, sudoración excesiva y algunas enfermedades graves.

1. Estrés

Cuando los niveles de estrés aumentan, muchas personas anhelan sus alimentos reconfortantes favoritos. Los alimentos que la gente quiere en ese momento suelen ser ricos en grasas, azúcar o sal.

El hábito de consumir tales productos puede reducir la salud general de una persona. Un artículo en el Journal of Health Psychology encontró una asociación significativa entre los niveles de estrés crónico, apetito y un índice de masa corporal (IMC) más alto.

Otro estudio mostró un vínculo entre el estrés y niveles más altos de la hormona grelina, que aumenta el hambre. Los resultados del estudio muestran que la grelina puede aumentar el apetito y provocar un aumento de peso.

2. Falta de sueño

¿Qué causa un mayor apetito por lo salado?
¿Qué causa un mayor apetito por lo salado?

Las personas que no duermen lo suficiente pueden experimentar hambre de bocadillos salados con más frecuencia. Un estudio de la revista Sleep descubrió que las personas privadas de sueño son menos capaces de resistir el apetito por su comida chatarra favorita, lo que conduce a un aumento de peso.

Debido a que la falta de sueño puede estar relacionada con otros problemas de salud, las personas que constantemente no pueden descansar pueden querer hablar de esto con sus médicos. Los trastornos del sueño, el estrés y los horarios ocupados suelen ser los culpables, pero un profesional de la salud puede ofrecer un diagnóstico claro y un posible plan de tratamiento.

3. Aburrimiento

Comer por aburrimiento es una alimentación emocional, similar a comer bajo estrés. Para determinar si los antojos de sal se deben al aburrimiento o al hambre, es útil buscar señales de hambre en el cuerpo. El verdadero hambre ocurre cuando el cuerpo humano necesita comida. Si una persona no ha comido durante varias horas, puede haber un hambre real.

Otros signos de hambre incluyen:

¿Qué causa un mayor apetito por lo salado?
¿Qué causa un mayor apetito por lo salado?

• estómago ruidoso;

• deseo de comer casi cualquier alimento, no específico;

• deseo de comer, que se vuelve más fuerte con el tiempo.

Estos signos indican que puede que sea hora de comer. Los alimentos salados con alto contenido de grasa rara vez son una buena opción alimenticia.

En cambio, uno debe buscar algo más saludable, como frutas o verduras crudas. Estas soluciones pueden minimizar la ingesta de sal al tiempo que alivian los antojos de alimentos crujientes y satisfactorios.

4. Sudoración excesiva

El sudor contiene sal, por lo que cuando una persona suda, los niveles de sodio disminuyen. Para la mayoría de las personas, la sudoración leve no es motivo de preocupación. Los niveles de sodio no disminuyen significativamente con la sudoración diaria y, por lo general, solo se necesita agua para restaurar los líquidos perdidos.

Los deportistas, los deportistas activos o las personas que trabajan en entornos muy calurosos pueden necesitar más sal para reemplazar la que se pierde por la sudoración excesiva o prolongada.

Cuando una persona pierde demasiado sodio, su cuerpo puede comenzar a desear sal. Un estudio encontró que las personas que trabajan en condiciones de calor durante 10 horas pueden perder hasta 15 gramos de sal, aunque esto puede variar ampliamente.

Se pueden recomendar bebidas con electrolitos o bebidas deportivas para las personas que hacen demasiado ejercicio o pasan muchas horas en un ambiente caluroso. Estas bebidas contienen sodio y otros electrolitos que pueden reemplazar lo que se pierde a través del sudor.

5. Síndrome premenstrual (SPM)

¿Qué causa un mayor apetito por lo salado?
¿Qué causa un mayor apetito por lo salado?

Una mujer puede sufrir varios cambios físicos y emocionales en los días previos a la menopausia. Estos cambios se conocen como síndrome premenstrual (SPM).

El deseo de comer, incluido el deseo de alimentos salados es un síntoma común. Estos apetitos pueden estar relacionados con fluctuaciones hormonales.

Las mujeres que experimentan apetitos relacionados con el síndrome premenstrual pueden tomar:

• Calcio y vitamina B6: un estudio de 2016 encontró que las mujeres que tomaron 500 mg de calcio y 40 mg de vitamina B6 tenían menos síntomas de síndrome premenstrual que aquellas que tomaron solo vitamina B6;

• Acupuntura y hierbas: una revisión de estudios mostró que las mujeres que usaban acupuntura y hierbas medicinales tenían una reducción del 50% en los síntomas del síndrome premenstrual;

• Anticonceptivos orales (píldoras anticonceptivas): las píldoras anticonceptivas mejoran los síntomas del síndrome premenstrual, según un estudio reciente de 2016. Sin embargo, las píldoras anticonceptivas pueden tener efectos secundarios y riesgos que deben analizarse con su médico.

6. Enfermedad de Addison

La enfermedad de Addison o insuficiencia suprarrenal ocurre cuando las glándulas suprarrenales no producen suficientes hormonas. Estas hormonas controlan la respuesta del cuerpo al estrés y regulan la presión arterial. Como resultado la enfermedad de Addison puede causar presión arterial muy baja y deseo repentino de sal.

Además del apetito por la sal, las personas con enfermedad de Addison pueden experimentar:

• debilidad;

• fatiga prolongada;

• falta de apetito o pérdida de peso no planificada;

• dolor de estómago;

• náuseas, vómitos o diarrea;

• mareos o desmayos debido a la presión arterial baja;

• nivel bajo de azúcar en sangre, llamado hipoglucemia;

• depresión o irritabilidad;

• dolor de cabeza;

• períodos menstruales irregulares o ausentes.

La enfermedad de Addison puede ser causada por:

• desorden autoinmune;

• tuberculosis;

• VIH y SIDA;

• ciertas infecciones bacterianas o fúngicas;

• problemas hipofisarios;

• suspender los medicamentos esteroides a largo plazo.

La enfermedad de Addison requiere atención médica para reemplazar las hormonas que las glándulas suprarrenales no producen. En casos graves, una persona puede sufrir una crisis suprarrenal. Esto sucede cuando los niveles de cortisol en el cuerpo descienden a niveles peligrosos. La crisis suprarrenal requiere atención médica urgente.

7. Síndrome de trueque

El síndrome de Bartter es una enfermedad genética. Las personas con síndrome de Barter no pueden reabsorber el sodio en los riñones. Como resultado, pierden demasiado sodio en la orina, lo que también conduce a una pérdida de potasio y calcio.

Debido a los bajos niveles de sodio, las personas con síndrome de trueque pueden tener ansias de sal. También pueden experimentar:

• aumento de peso lento observado en niños;

• estreñimiento;

• necesidad de orinar con frecuencia;

• cálculos renales;

• presión arterial baja;

• espasmos musculares y debilidad.

Este síndrome generalmente se diagnostica en la primera infancia al examinar la orina y la sangre.

Muy a menudo, las pasiones saladas son simplemente antojos de alimentos debido al estrés, la fatiga, el aburrimiento o el síndrome premenstrual. Sin embargo, el deseo constante de sal puede ser un indicio de ciertas afecciones médicas.

Si no se puede encontrar la causa obvia de su apetito salado o si son posibles factores de riesgo de problemas renales o suprarrenales, se debe hablar con su médico.

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